Virginia Montes.
La izquierda está acostumbrada a criticar agriamente a quienes se oponen a la inmigración ilegal y a la apertura de fronteras. De inmediato tiende al anatema o a la descalificación como fascista. ¿Puede afirmarse esto de Sahra Wagenknecht? Estamos ante la copresidenta del grupo parlamentario Die Linke (La Izquierda) en el Bundestag. Es decir, está a la izquierda del SPD pero considera que la izquierda peca de ingenuidad en posición a favor de la inmigración, que está resquebrajando los derechos sociales.
Para Sahra Wagenknecht no son los trabajadores los que se equivocan cuando abandonan en masa a la izquierda y se constituyen como la base social de Alternativa para Alemania. Es la izquierda la que se equivoca en sus posiciones y si no representa a los trabajadores, ¿a quién representa la izquierda?
Tras la masacre en el Mercado navideño de Berlín, la dirigente izquierdista denunció «la apertura incontrolada de fronteras» y también cuestionó el derecho de asilo del que gozaban los magrebíes que perpetraron horribles y generalizadas agresiones sexuales el 31 de diciembre de 2015 en Colonia.
Con la decisión de Merkel de abrir, en septiembre de 2015, las fronteras a los refugiados, «muchos problemas sociales» se han «acentuado«, afirma la exmiembro del partido comunista de la RDA.