Roberto Centeno. Catedrático de Economía.
El grado de cobardía y servilismo hacia la izquierda y el separatismo del Rey Felipe VI parece no tener límite. Un comportamiento tan indigno como inadmisible y que constituye una ofensa inaceptable para todos los españoles de bien, de quien dice representarnos como Monarca.
La última ha sido llevar al ex presidente de los EEUU, Barack Obama, para mostrarle el famoso Guernica pintado por el comunista, aunque genial, Pablo Picasso, del bombardeo de Guernica por la Legión Cóndor, un bombardeo tan menor que solo produce 126 muertos, pero que la propaganda izquierdista- separatista eleva a la categoría de “crimen contra la Humanidad” y similar a los de la II Guerra Mundial que producían decenas de miles de muertos, y que el cuadro de Picasso contribuyó a difundir por el mundo en lo que constituye la mayor patraña histórica de la Guerra Civil .
La descripción del bombardeo en Wikipedia, que siempre amplifica los puntos de vista izquierdistas, es el siguiente, “el bombardeo de Guernica (Operación Rügen) fue un ataque aéreo realizado sobre esta población española el 26 de abril de 1937, por parte de la Legión Cóndor y Aviación Legionaria Italiana. Las estimaciones de víctimas cifran los fallecidos en 126 según el estudio más reciente y exhaustivo”. El bombardeo fue decisión personal del teniente coronel Wolfram von Richthofen, segundo al mando de la Legión Cóndor sin conocimiento de Franco, lo que provocó un serio altercado, porque Franco no estaba dispuesto a que ni la Legión Cóndor ni nadie funcionaran por libre.
Comparado con los bombardeos de Varsovia ( 50.000 muertos) o Rotterdam (40.000 muertos), ciudades ambas indefensas como Guernica, las cifras hablan por si solas. Pero incluso el bombardeo de Durango un mes antes por la Aviación Legionaria Italiana que produjo 298 muertos, y que nadie conoce porque no lo inmortalizó Picasso fue mucho más grave. Lo que sí ocurrió en Guernica, cuyo casco antiguo estaba construido con casas de madera, es que después del bombardeo donde se utilizaron bombas incendiarias, se produjo un fuerte incendio. Es un hecho conocido y perfectamente documentado que los bomberos de Bilbao que deberían haber tardado no más de una hora en llegar, tardaron seis horas, lo que llevo a la destrucción de todo el casco histórico.
No se entiende por ello que el Rey Felipe muestre a Obama el Guernica, algo que ha encantado a izquierdistas y separatistas, aunque no por ello van a dejar de pedir la República, en lugar de mostrarles la obras maestras del Prado. Y ya puestos a mostrarle la realidad de la Guerra Civil, ¿por que Don Felipe no le llevó también a Paracuellos donde fueron asesinados no 126 personas sino 5.000 hombres, mujeres y niños por orden del genocida Santiago Carrillo, y muchos de los cuales fueron enterrados todavía vivos? A no ser que el Monarca haya empezado a cumplir escrupulosamente la canallesca Ley de Memoria Histórica, con la que el guerra civilista Sánchez pretende hacer obligatoria la sectaria y falsa visión del Frente Popular, y encarcelar a quienes la pongan en duda, siempre que la derecha cobarde y sobre todo el Tribunal de Derechos Humanos se lo permita.
La verdad es que la cobardía de Don Felipe y sus flagrante incumplimiento de sus más sagrados deberes constitucionales le inhabilita ya como Rey de todos los españoles. Primero incumplió su deber constitucional de mediar y dirimir los conflictos entre instituciones. Ni medió ni dirimió nada, por no hacer ni siquiera reunió bajo su presidencia a las instituciones en conflicto se limitó a mirar para otro lado sin mover un solo dedo cuando se preparaba con luz y taquígrafos un golpe de Estado. Después, presionado por los millones de españoles que salieron a la calle en defensa de la unidad de España, pronunció un discurso en televisión en contra de la opinión de Rajoy y de esa intrigante profesional que es Sáenz de Santamaría, responsable directa del desastre de España en Cataluña y que ahora pretende dirigir el PP, lo que sería el final definitivo de esa formación.
Un discurso muy campanudo pero sin la menor voluntad real de hacer nada. Rajoy y Santamaría a quienes principalmente iba dirigido se lo pasaron por el forro, y este cobarde ni siquiera les llamó a capítulo para preguntarles por que le ignoraban. Después y como Conde de Barcelona debería haberse instalado allí en forma permanente hasta que resolviera el contencioso catalán, dando una señal inequívoca a los golpistas de que jamás conseguirían su propósito, y a la mitad de catalanes no separatistas, abandonados a sus suerte por el miserable de Rajoy y no digamos por el guerra civilista de Sánchez, de que contaban con su apoyo incondicional y de que no estaban solos. Y aparte llamar una a una a las cien grandes familias de catalanes traidores que han financiado y apoyado todo el proceso, y decirles muy claro que están con España o contra España, y si están en contra que se atengan a las consecuencias. Una organización criminal y sus 16.000 camisas pardas que no tienen ni media bofetada, no puede desafiar a una nación de 45 millones de habitantes e irse de rositas.
Nada hizo este Monarca cobarde, pero es mucho peor pues en el colmo de su indignidad va a entregan unos premios a Gerona, y la alcaldesa le niega la utilización de un lugar público que pertenece a España y este miserable se humilla ante una mindundi de mierda y se esconde en un restaurante para repartir los premios. ¿Pero como este personaje puede continuar siendo un minuto más Rey de España?. ¿Hasta cuando vamos a tolerar los españoles de bien estas humillaciones a manos de una chusma separatista cuya única fuerza reside en la cobardía inaudita del Gobierno y del Rey?. Y termino esta historia de dejación, humillaciones, cobardía e infamia, teniendo toda la Ley y toda la fuerza de nuestro lado, ¿acaso Don Felipe ha exigido como es su deber que Sánchez acuda a Zarzuela y le explique con todo detalle hasta que punto está dispuesto a vender España en su próxima reunión con el nazi Torra, para mantener el apoyo de los enemigos de España? Para Sánchez más aún que para Rajoy, el Rey es un piernas al que se puede ignorar impunemente. DELENDA EST MONARCHIA.