Virginia Montes.
La Europa comunitaria ha perdido la unidad y también el sentido de la realidad. Se trata ahora, simplemente, de salvar a Ángela Merkel acosada políticamente por su ministro de Interior, Horst Seehofer. La impresión general es que va a haber de nuevo una alta dosis de retórica y que Seehofer cederá a la espera de que el 14 de octubre Alternativa para Alemania, la única respuesta sólida, rompa los últimos vestigios de un consenso que hace tiempo estalló.
La oferta a debatir en el Consejo de Europa es la creación de «plataforma de desembarco» de inmigrantes fuera de Europa, según Donald Tusk, “si es posible” en cooperación con la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM)”. La consideración de un criterio humanitario según el cual Europa debería acoger a toda África y pagar su manutención, su escolarización y su sanidad ha dejado de estar en la agenda europea, aunque se mantiene en España donde el Ministerio de Sanidad está dispuesto a gastar 3.000 millones de euros, que no tiene, para pagar la Sanidad de los ilegales, que deberían ser deportados.
