Virginia Montes.
Buen conocedor de los problemas que la inmigración conlleva, y de los efectos devastadores de los efectos llamada, Matteo Salvini, que se ha convertido en el auténtico líder de Italia, ha ironizado sobre Pedro Sánchez en una comparecencia del Senado: “Agradezco a nuestros amigos españoles y agradezco el buen corazón del presidente Sánchez. Supongo y espero que ejercitará su generosidad también en las próximas semanas, teniendo un amplio margen para hacerlo”.
Salvini ha recordado que Italia “acoge a 170.000 migrantes y España a 16.000”. También ha arremetido contra una de sus bestias negras: Francia. El portavoz del Eyseo, Gabriel Attal había dicho que la actuación de Italia en el Aquarius “hace vomitar”. Salvini ha respondido: “Nuestra historia de solidaridad, humanidad y voluntariado no merece ser apostrofada en estos términos de representantes del gobierno francés, y espero que presenten sus excusas oficiales en un tiempo breve”, añadió el ministro del Interior, que pide a Macron pruebas de “generosidad” en la acogida de migrantes indicando que Francia ha enviado 10.249 migrantes que habían traspasado la frontera este año. El viernes está prevista la visita de Giuseppe Conte a París y no se descarta que sea suspendida. La oficina del Palazzo Chigi ha emitido un comunicado en el que afirma que “Italia no puede aceptar lecciones hipócritas sobre inmigración de parte de países que siempre han mirado hacia otro lado”.