Enrique de Diego.
Un fantasma recorre Europa. Responde al nombre de Carles Puigdemont. Eres el personaje más ridículo y deleznable que ha producido Cataluña en su historia reciente. Eres un showman que no llega a payaso, un correveidile patético que quizás más que la cárcel, a la que presuntamente estás abocado, necesitarías un frenopático. Es sabido que tras una vida de mediocre cazasubvenciones del separatismo, tu motivación era y es pasar a la historia. Por la senda elegida, vas a pasar a la historia del tebeo.
No has provocado más que desastres. Los que te han seguido de buena fe están en la cárcel o han abjurado de tus estupideces para evitarla. Otros, que siguen en este teatrillo del absurdo que has montado, están haciendo méritos para ir al trullo y de ser España un Estado de Derecho digno ya estarían presos y juzgados. Ni tan siquiera sabes, ignorante proteico, que las leyes están para cumplirse, ni que la Europa actual es el fruto del pacto de respetar las fronteras tal y como surgieron de la segunda gran guerra, para no aventar conflictos.
Estás hundiendo la economía catalana, has hecho cambiar la sede social de más de 3.000 empresas catalanas, algunas de conspicuos separatistas, has hecho perder la de las dos instituciones financieras señeras, CaixaBank y Banco de Sabadell, estás ahuyentando el turismo (en diciembre el 10% de descenso), estás hundiendo la imagen de Cataluña, que ya hasta Ada Colau se ve obligada a hacer planes para relanzar la imagen de Barcelona. No se consume cava catalán por tu culpa, mientras se duplica el consumo de cava extremeño y valenciano, y el Consejo Regulador quiere medidas para que sólo pueda incrementarse el 0,1% las hectáreas de cultivo de uva para cava para los próximos tres años, y el Ministerio de Agricultura ha tragado emitiendo un decreto el 29 de diciembre por el que sólo permite aumentar 172,2 hectáreas.
Serías Atila si tuvieras hechura y virilidad, porque por donde pasas no crece la hierba. Eres el reverso del caballero de la triste figura haciendo el ridículo por Europa. Lo de Dinamarca ya ha sido el colmo del patetismo, has batido todos los récords. La profesora Marlene Wind te ha puesto en tu sitio, el del ignorante y el delincuente; no te considera un demócrata, sino un populista manipulador. «Quería utilizar nuestras instituciones oficiales y educativas para hacer propaganda y populismo del suyo, pero no somos tontos, no se lo hemos permitido«. Has encontrado alguna comprensión en las influyentes Islas Feroe. Lo de proponer Cataluña como la «Dinamarca del Sur» es de chirigota.
Fuera de tus ámbitos fanáticos, altamente subvencionados durante décadas, y abundantemente adoctrinados en mentiras, ensoñaciones y odios primarios, te pones en evidencia. Has sido la coartada para tapar la corrupción de tu partido, que ha cambiado tanto de nombre que resulta más difícil seguirle la pista que al 3%. Ahora amenazas con venir a España: «ese es mi camino en los próximos días«. Llarena dirá, pero tus presuntos delitos no son menores. La sedición es de extrema gravedad. En Dinamarca se pena con cadena perpetua. Si no se ataja, la sedición lleva a la guerra civil. Aquí se ha atajado menos que a medias, de manera precipitada y vergonzante.
No puedes, Carles Puigdemont, en ningún caso, ser el presidente de la Generalitat. Has hecho sobrados méritos para pasarte décadas en Estremera.
Carta abierta al miserable de Carles Puigdemont: Eres un canalla al que hay que parar