Virginia Montes.
Polonia cada vez más decidido a preservar su identidad cristiana y cultural. El país se niega a aplicar el plan europeo de transferencia de 160.000 demandadores de asilo desde Italia y Grecia.
Polonia aceptará inmigrantes venidos de Europa, pero en ningún caso de países africanos o de Medio Oriente. «Polonia está abierta a la inmigración. Y el año último, por ejemplo, hemos librado 1.267.ooo visados a ucranianos. La mitad de esas visas eran permisos de trabajo«, ha declarado el ministro de asuntos exteriores polaco, Witold Waszcykowski.
La población de la UE se estima en 512 millones de habitantes y la crisis migratoria ha contribuido a un alza de más de 1,5 millón de personas en 2016. En junio, la Comisión europea ha lanzado un aviso de infracción contra los tres países que rechazan participar en el programa europeo de reparto: Polonia, República Checa y Hungría.