Josep Sansano.
En dos ocasiones, en la Noche de la Economía Alicantina, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, se comprometió a que la sede de la Agencia Valenciana de la Innovación estaría en Alicante. No ha cumplido su palabra. La sede oficial o nominal estará en el edificio Prop de Alicante, pero la sede operativa, en Valencia.
Para Francisco Maestre, «es un agravio» como cuando «se prometió que la Dirección General de Turismo estaría en Benidorm y no ha sido así«. Es «absurda» la división de sedes, porque «las órdenes vendrán de Valencia«. Sólo se trata «de colocar a un antiguo de la política como Andrés García Reche».
Para el diputado provincial Fernando Sepulcre, «el PP debería haber estado más encima» porque la operación se veía venir. «El grueso de la Oficina se queda en Valencia y las migajas en Alicante».
«Migajas» es el concepto que utiliza, igualmente, Rafael Candela, coordinador local del PP de Alicante: «Puig nos deja las migajas a los alicantinos como una limosna«. Se trata de un «enorme engaño«, quedando en Alicante una simple sede «para tramitar» mientras «la sede operativa permanecerá en Valencia».
La Agencia Valenciana de la Innovación tendrá un presupuesto de 28 millones de euros y se pretende que se eleve hasta 150 millones en 2020, y su objetivo es cambiar el «modelo productivo» de la Comunidad Valenciana, por lo que se trata de una estrategia para «varias legislaturas«, según Andrés García Reche, que puso en marcha los institutos tecnológicos en la etapa de Joan Lerma.