AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Las vacunas producen autismo y otros males psíquicos: son un negocio criminal

Redacción




El periodista Javier Cárdenas. /Foto: RTVE.es.

Enrique de Diego

El autismo, en efecto, se ha convertido en una epidemia y su causa son las vacunas. No se quiere reconocer ni investigar porque las vacunas son un gran negocio del inmenso negocio que es la industria farmacéutica, la más rentable de todas, con una facturación superior al tráfico de armas o las telecomunicaciones.

No solo producen autismo, sino otra serie de males psíquicos, pues algunas de ellas contienes metales pesados, como el mercurio. Los niños sufren como reacción convulsiones febriles y epilépticas que dañan su cerebro, que provocan focos irritativos. Eso es una verdad científica, que pueden corroborar infinidad de familias que han sido llevadas a ese desastre que provocará sufrimiento durante todas sus vidas y que cercena esperanzas. Esas familias no pueden denunciar sus casos, pues serán inmediatamente desacreditadas, pues el negocio es muy grande.

Es un tipo de crimen contra la humanidad que se hace desde el poder político, corrompido por las industrias farmacéuticas: el número de políticos colocados en nómina es escandaloso. Y es un crimen amparado por la corrupta clase médica y por la corruptísima clase periodística. Pero cualquier familia que tiene un hijo autista sabe que nació normal, que todo iba bien, hasta que fue vacunado.

En estos días, se ha intentado silenciar, mediante la consabida polémica condescendiente e inquisitorial, al periodista Javier Cárdenas que en su programa Levántate y Cárdenas de Europa FM ha hecho las siguientes reflexiones: «El autismo se ha convertido en una epidemia. Para que vean hasta qué punto algo se está haciendo mal con las vacunas. Es una teoría apoyada en hechos importantes: que tienen metales pesados que los niños no saben absorber, su cuerpo no lo sabe absorber o por la razón que sea. Pero en Estados Unidos ha aumentado un 78% en los diez últimos años, casi un 80%, los casos de autismo. Y evidentemente no han aumentado por casualidad».

Y la constatación de una realidad: «los niños nacen totalmente normales, cuando pasa un tiempo, sobre todo una gran parte de ellos a raíz de las primeras vacunas, comienza ese calvario para tantas familias».

La Organización Médica Colegial, que en lo que yo recuerdo es uno de los organismos más corruptos, pionero en la corrupción, se ha apresurado a lamentar el «sensacionalismo alarmista» y a lanzar el dogma: «las vacunas no causan autismo, son seguras, efectivas y salvan cada año millones de vidas«. Las vacunas causan autismo y otros muchos males. No son seguras sino nocivas y no salvan ninguna vida: la eliminación de las pandemias ha sido el fruto de las mejoras sustanciales en la higiene personal y colectiva. La única realmente efectiva, la de la viruela, tiene un fundamento naturista.

NO TE LO PIERDAS:   ¡La sociedad civil canaria se organiza y saldrá masivamente a la calle! Vídeo

Por supuesto, nunca pondría a ningún hijo vacuna alguna. No le sometería a ese riesgo terrible, que estos negociantes de la medicina homicida perpetran. Y recomiendo a todos, con toda la tranquilidad, que no pongan vacunas a sus hijos. Es terrible e inhumano que desgracien a los hijos en la infancia con el negocio asesino de las vacunas, que sí provocan autismo y otros muchos males.