Virginia Montes
En plena psicosis de atentado en grandes aglomeraciones, tras masacres como la de Bataclan, el estadio Manchester Arena ha sido el escenario de dos explosiones, tal y como identifican los testigos. La Policía hizo una primera confirmación de que había «varios muertos» y heridos. El primer balance oficial alcanza niveles de masacre: 22 muertos y 59 heridos. La Policía afirma que se trata de un atentado terrorista perpetrado por un suicida que portaría una bomba improvisada. Entre los muertos se encuentran varios niños. La explosión se produjo fuera del recinto y provocó escenas de pánico.
Los servicios de emergencias de Manchester pidieron a los ciudadanos que se mantengan alejados del Manchester Arena, después de que varios testigos reportaran a través de las redes sociales dos explosiones cerca del estadio, donde esta noche actuaba la cantante Ariana Grande. Ésta había terminado su última canción y se marchaba cuando se produjeron las dos explosiones. Según testigos, «de repente todo el mundo empezó a gritar y a correr».
«Los servicios de emergencia están respondiendo a un incidente grave en el Manchester Arena. Eviten la zona. Más detalles cuando estén disponibles», ha indicado la Policía a través de su cuenta en la red social Twitter. Asimismo, el servicio de ambulancias de North West ha confirmado a través de esta misma vía que está «respondiendo a un incidente en el Manchester Arena».
Poco antes, testigos citados por la cadena de televisión británica Sky News indicaron que se había registrado un «estallido» en el lugar. La Red de Ferrocarriles británica ha anunciado a través de Twitter que la estación de tren de Manchester Victoria ha sido evacuada y cerrada, agregando que «se espera que la perturbación continúe hasta el final del día».
La primera ministra Theresa May ha calificado la masacre de «atroz ataque terrorista» y la ministra del Interior ha hablado de «barbarie«. La condena de los políticos, que para nada sirve, ha sido general.