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¡Oh, España, amada España, dueles tanto porque das asco!

Redacción




Roban hasta usando a los héroes del Dos de Mayo.

Enrique de Diego

La machadiana España que bosteza convive con la España que vomita. España es un lodazal, una cloaca y un vomitorio. Nos duele España, como a los del 98, del asco que nos da.

Asco y vómito me producen todos y cada uno de los dirigentes del PP, incluidos Mariano Rajoy y Cristina Cifuentes, pero también esos españoles –con idéntica o menos dignidad que aquellos que arrastraban como mulos la carreta del felón Fernando VII mientras gritaban alborozados “vivan las caenas”- que celebran bajo el balcón de Génova las victorias del PP jaleando a la dirección de la mafia, a patentes corruptos.

La España que bosteza, pastueña y aborregada, legitima el robo y el pillaje, que es la manifestación más descarnada y obscena de un expolio general e inmisericorde para llevar a los honrados y los laboriosos a la miseria y al hambre, mientras el hampa gobierna y campa por sus respetos, sin que la nación degradada sea capaz de expresar su dignidad y su ira.

Francisco Marhuenda, el antiperiodismo. /Foto: blogs.ppmadrid.es.

Asco y vómito ante el lodazal de la Justicia, ante la inmensa miseria de una Fiscalía lacaya y corrompida, ante el latrocinio mediático con su coro de lacayos, ante un juez como Eloy Velasco que tras servir al PP como director general de Justicia de la Comunidad Valenciana, tras colocar a su mujer en la Comunidad de Madrid, hace un chantaje manifiesto reclamando su puesto y su prebenda en la Comisión de Apelaciones de la Audiencia Nacional, y una vez ganado el pulso y ganada la sinecura levanta prisiones preventivas abusivas, deja libres a Mauricio Casals y Francisco Marhuenda por lo mismo que se mantiene en la cárcel a Luis Pineda -¡por lo mismo!- y dicta sentencia exculpatoria a la cómplice necesaria, Cristina Cifuentes. ¡Asco de Justicia, hechas jirones las togas y revestida de harapos!

Mariano Rajoy. /Foto: jorgebustos.com.

Asco de España, asco de Mariano Rajoy, indigno presidente de lo que fue una gran nación y hoy es una oveja mil veces esquilmada. Rajoy, el recordman del sobresueldo en negro de la caja B, ha hecho todas las campañas electorales con sobredosis de dinero negro, y es él –y su Gobierno y su Montoro– los que presuntamente persiguen el dinero negro, ya se ve que de todos los demás, que ellos tienen bula y estos delincuentes compulsivos están al margen de la Ley, que juran o prometen cumplir y hacer cumplir. ¡Perjuros, mentirosos, qué asco dais! ¡Oh Dios, qué inmenso asco!

Ahora que es tiempo de la Declaración de la Renta, ese expolio brutal al que están siendo sometidos los españoles, hasta el punto de que se muera un familiar es una doble desgracia, por el duelo y por el impuesto de sucesiones, hay que decir que Hacienda no son ellos; ellos tienen sus cuentas en Suiza, sus Sicav con el 1%, sus mordidas, sus regalos…Las penas son de nosotros, las comisiones son ajenas. La tortura fiscal, la extorsión extenuante, es practicada, desde el poder, por mafias organizadas, por bandidos, por delincuentes habituales. Y hay una España que bosteza y vota y jalea y aplaude su exterminio económico con escarnio, mofa y befa. Aquí nunca empieza el alboroto, pero esto es un cachondeo.

Incluso han mancillado la sangre patriótica derramada el Dos de Mayo, de aquel pueblo que era capaz de levantarse ante la humillación, dispuestos a vender cara su vida antes que padecer silentes la vejación. A finales de 2007, esa gran tonta del bote, que fue de lideresa adulada por la corte losantiana de los milagros, la madre nutricia de todos los corruptos, Esperanza Aguirre puso en marcha la Fundación Dos de Mayo, Nación y Libertad. ¡Y una mierda en todos nuestros ideales nobles! Hay sospechas de que se utilizó para la corrupción en gran escala, con dos sorprendentes entregas, en 2008 y 2009, de 4,55 millones y 1,86 millones por Caja Madrid, donde gobernaba el PP y mandaba la tonta del bote, que no se enteraba de nada y tenía las pituitarias quemadas de tanta ciénaga. ¡Qué levanten su digna y heroica cabeza Luis Daoíz, Pedro Velarde, el teniente Ruiz y Manuela Malasaña para que vean en qué han quedado los herederos de su estirpe, los españoles de la nueva Fuenteovejuna, todos a ninguna! En el Patronato estaban Ignacio González, Francisco Granados y Lucía Figar. Solo faltaba Alí Babá, que los cuarenta ladrones sí que estaban. ¿Y para robar necesitan ensuciar el Dos de Mayo y las sagradas nociones de Nación y Libertad?

¡Pero si era posible quebrar las cajas, con dos siglos de honradez y de pericia a sus espaldas, y esta plaga de los políticos profesionales robando a manos llenas en un saqueo impune y brutal han acabado con ellas en horas veinticuatro, en menos que Lope de Vega pasaba de las musas al teatro! Esta canalla infame ha convertido la honradez en una forma de suicidio.

María Victoria Cristóbal Araujo. /Foto: enmajadahonda.es.

Francisco Granados tenía una amante, una barragana, una puta, como se decía antes. A la que a la vieja usanza regaló piso y coche. Pero los tiempos avanzan que es una barbaridad. Ahora esas cosas se hacen con cargo al contribuyente, que hay puestos para todos, 17 autonomías que para nada sirven salvo para robar a manos llenas y organismos autónomos, y casas de putas y de chaperos con nombres oficiales. Así que María Victoria Cristóbal Araujo, Vicky para los amigos, fue directora de la Agencia Madrileña de la Emigración, que aquí tenemos 18 agencias de cada cosa, y asesora de las consejerías de Granados, para tenerla cerca, debajo de la mesa del despacho. Y Vicky se desplazaba con un Mercedes Benz SLK200 pagado por el empresario comisionista Ramiro Cid, primado en Valdemoro. Pero eso no es cierto, el Mercedes de Vicky y los puestos de Vicky y el piso de Vicky y el liguero y las bragas de Vicky y los preservativos de Granados, todo eso lo han pagado y lo pagan estos españoles aplatanados con su Declaración de la Renta, con la sangre, el sudor y las lágrimas de sus hijos y sus nietos, puesto que la deuda pública ya es superior al PIB y las letras de todas las Vickys y todos los Granados y los González han sido girados para varias generaciones, para muchos que ni tan siquiera han nacido, y que espero que escupan a los españoles cobardes de esta hora de expolio e indignidad.

Arturo Fernández.

Y está lo de la rubia o la china haciéndose la digna, camino de ser la nueva tonta del bote, que no se ha enterado, uso y abuso de Lexatín, y toda una vida de funcionaria del partido, que ella era la presidenta de la Comisión que concedía los contratos al donante y tomante Arturo Fernández. Se le tenían que dar y se los daba Cristina Cifuentes. ¡Y todavía habla de honradez y de garantías en las comisiones de contratación! Y todavía esta colaborara necesaria, que todo lo sabía y todo lo consentía, se ha permitido dar lecciones de no sé qué ética.

Esta España que bosteza y amanece con hierático y descoyuntado bostezo se desayuna cada día con un nuevo escándalo, tras todos los que ya ha consentido y digerido, incapaz de vomitar su ira. Esta España que bosteza se dispone a rellenar su Declaración de la Renta para que la sigan robando. ¡Qué ponga Montoro una casilla para corrupción y los españoles bostezantes de hoy son capaces de poner la crucecita! Esta España de charanga y pandereta, de fútbol y teleserie, la última de Eurovisión, vive cada el reality show de su degradación, de su expolio, de su decadencia, y traga y traga y traga, con inmensas tragaderas que nunca los españoles tuvieron en su historia hasta esta reedición borbónica bufonesca, en la que los pícaros no se refugian en el Patio de Monipodio sino que se alternan en el Palacio de La Moncloa, en la que unos a otros se avisan de que están siendo investigados para que ponga pies en polvorosa y en la que los fiscales son los más adictos y fervorosos abogados defensores de los ladrones de cuello blanco y coche oficial. ¡Despierta España, te han llevado a la ruina y te llevarán al hambre, entre hirientes risas sardónicas!

¡Oh, España, amada España, hoy dueles tanto porque das asco, un inmenso asco!