Miguel Sempere
La acusación particular de la Asociación de Abogados Demócratas Europeos ha conseguido que la Audiencia Nacional dicte pena de telediario para el muy presunto chorizo Mariano Rajoy, que aparece en la lista de Bárcenas como recipientario de cuantiosas cantidades de la caja B del PP.
Rajoy tendrá que declarar como testigo en la causa que se sigue en la Audiencia Nacional sobre la primera época de la trama Gürtel. La acusación particular argumentó que Mariano Rajoy era el encargado de las campañas electorales y que no podía quedar fuera sin prestar testimonio. La duda estriba en si podría hacerlo por escrito, lo cual es muy dudoso pues se trata de tiempo y materia en los que no era presidente del Gobierno, o por videoconferencia, a él que le gusta tanto el plasma.
Fuentes jurídicas consideran que “Mariano Rajoy hace tiempo que debía estar sentado en el banquillo pero de los acusados”. Rajoy cobró de la caja B 373.000 euros, además de diversas cantidades para trajes y corbatas, porque tiene fama de rata.