Redacción.
Lectores catalanes de Rambla Libre nos informan de que en el Metro de Barcelona se está difundiendo un nuevo programa en la televisión del Ayuntamiento que se llama «Oh My Goig«. «Goig» en catalán significa algo así como «gozo«. Es una palabra que tiene difícil traducción en lengua española, sin embargo en otras lenguas romances como el italiano la traducción es más directa: giogia. Nótese que además sustituye a God (Dios en inglés) por gozo.
En el metro de Barcelona bombardean constantemente con propaganda de películas degeneradas y subvencionadas. Entre ellas la de una niña que tiene dos madres, dos adolescentes que «exploran su sexualidad» y la niña se queda embarazada, propaganda a favor de los «refugiados» y todo tipo de despropósitos. No contentos con eso han decido anunciar este nuevo programa cuyo corte publicitario contiene imágenes y sonidos obscenos y carteles en los que pone: «masturbación», «sexo oral», «penetración» y «anal«. Todo esto a la vista de cualquier usuario del transporte público, aunque bien podríamos llamarlo transporte púbico.
A raíz de esta información nos metemos en el Youtube y comenzamos a ver el primer programa emitido en la televisión Betevé que depende del Ayuntamiento de Barcelona. Al principio salen unas niñas menores que dicen cosas tan bonitas y apropiadas como estas:
– «¿Cómo eres en la cama?»
– «Vaya puta mierda de test.»
– «¿Qué es lo que más te gusta hacerle a tu chico?» A lo que responde la otra niña: «¿Y por qué tiene que ser un chico?»
– «Ponerle caliente con mensajes subidos de tono».
– «¿Dónde es el sitio más raro donde lo habéis hecho?» («Hacerlo» nos aclaran las niñas que significa «follar»)
– «¿No me digas que eres virgen? ¡Qué fuerte!»
– «Me comía el coño súper bien».
– «De follar follar, nada».
Además, nos decía una de las niñas, que después de Nacho vino Claudia, con la que estuvo dos meses y quiso «hacer un trío«. La otra niña nos dice que no sabe si la penetraron por los dos agujeros, porque no sabe si por uno de ellos llegó a entrar.
Después de esto hace su aparición estelar la presentadora Noe Elvira. Durante su intervención alerta a los niños de que algún día puede aparecer alguien en su instituto que les hable de las cosas horribles que les pueden pasar a sus genitales si tenemos alguna infección de transmisión sexual. Si la «educación sexual» se limita a eso y a las clases de biología arenga a los niños a denunciar.
El colofón llega cuando dice que el aborto, al que considera la conquista de un derecho de las mujeres por parte del movimiento feminista, es gratuito. En ese momento se pone a bailotear.
Es lamentable que Ada Colau dedique las instituciones públicas, y el dinero del contribuyente, a la corrupción de menores en gran escala, convirtiendo los transportes públicos en un escenario de obscenidad, pederastia o en la antesala de un prostíbulo.