Luis Bru
Unidad Editorial se ha convertido en la pesadilla de la matriz RCS Mediagroup, cuyo socio mayoritario es el italiano Urbano Cairo. Hoy se ha reunido el Consejo de Administración de RCS en Milán con perspectivas sombrías.
El año ha comenzado mal, con bajadas en ventas y publicidad, y El Mundo se ha convertido en un lastre. A pesar de despidos y de vivir una economía de guerra, con reducciones al mínimo en gastos superfluos, como taxis, teléfono, viajes y comidas de empresas, sobre la mesa hay nuevos recortes como el cierre del suplemento Papel, que se puso en marcha en septiembre de 2015 y que no ha funcionado, también se comenta la posibilidad del cierre de más delegaciones y sus correspondientes ediciones, como la de Alicante. Las pérdidas en el año 2016 fueron de 5,4 millones, a pesar del ERE de 160 trabajadores.
La mala situación económica ha enrarecido la vida interna. El director Pedro García Cuartango no se habla con Antonio Fernández Galiano ni con el director general, Javier Cabrerizo, a los que tiene prohibido poner el pie en la redacción; al tiempo, suenan nombres para la dirección, como los de Carlos Segovia y Arcadi Espada.