Enrique de Diego
Su caso está claro. Usted, Pedro Antonio Sánchez, que tiene las posaderas pegadas al sillón con silicona, debe dimitir. Da lo mismo su usted ha metido la mano o la pata, si lo hizo en grado de tentativa cuando iba a contratar, con cargo al contribuyente, con la trama Púnica para que le mejoraran su imagen, y no lo hizo porque estalló el escándalo, no por ganas. Eso se ha llamado siempre en grado de tentativa, hasta que en esta mierdocracia la casta corrupta PP ha impuesto sus criterios, que pasan por remover al fiscal Manuel López Bernal y porque el fiscal general del Gobierno actúe como el consejero de la mafia.
Usted debe dimitir porque se comprometió públicamente a hacerlo si le imputaban en el caso Auditorio y de no hacerlo sería usted un mentiroso compulsivo, incapaz de generar la más mínima confianza. Si usted miente en eso, puede mentir en todo. Y porque está en el acuerdo con Ciudadanos, aunque, bueno, eso es papel higiénico.
Ustedes, los políticos están cada día más desprestigiados y usted es una vergüenza para Murcia. ¿Cuál es la diferencia entre corrupción política y administrativa? Que usted no se ha llevado el dinero, que está ahí. Permítame que empiece a dudarlo, pues usted es un hombre sin palabra. Usted no ha metido la mano en la caja, pero no sabemos si la ha metido en el maletín, lo que sabemos es que a usted, como a todos, le dio por montar un Auditorio en Puerto Lumbreras, como le dio a todos los alcaldes de España, que todas iban a ser Ciudad de Congresos. Así que usted es una nulidad.
No voy a decir que los murcianos no se merecen tenerle a usted de presidente, porque es notorio que ha habido murcianos que le han votado a pesar de que fueron timados con el “agua para todos” y a que la región de Murcia apesta a cloaca en cada metro cuadrado.
La cuestión es que usted, apegado al sillón como una lapa, está terminando por destruir esa ficción de la Fiscalía que, como no prevarica, actúa como la defensa de oficio de los corruptos. Usted lo es, en grado de tentativa, no; en grado de estampida, porque –insisto- estalló el escándalo.
Y, bueno, los de Ciudadanos que dejen de marear la perdiz y presenten moción de censura.
Usted, Pedro Antonio Sánchez, dijo que dimitiría y ya esta tardando, cara dura.