Miguel Sempere
La operación de Susana Díaz, a las órdenes de Felipe González, de defenestrar a Pedro Sánchez y convertir al PSOE en un apéndice subalterno de Génova ha costado muy cara al partido de Ferraz que se despeña en la encuesta del CIS: pierde 6,1 puntos con respecto a la última encuesta, pasando del 23,1 del mes de julio al 17% del CIS de octubre. Por su parte, el PP sube dos puntos y pasa del 32,5 de julio al 34,5; Podemos realizaría el sorpasso y se convertiría en la segunda fuerza política con un 21,8% de la intención de voto (frente al 19,6 que lograba en julio). Ciudadanos también sube, aunque en menor medida: pasa del 12% de julio al 12,8% en octubre.
El sondeo, de 2.500 entrevistas, ha sido realizado entre el 1 y el 10 de octubre, es decir, en plena efervescencia de la batalla interna socialista entre los barones críticos y los partidarios de Pedro Sánchez, que acabó con la defenestración del ya exsecretario general del PSOE y que ha dejado una herida en su electorado que será difícil de restañar. La dimisión se produjo precisamente el 1 de octubre, cuando comenzó el sondeo.
La falta de trabajo (71,3%) y los casos de corrupción y fraude (37,6%) siguen siendo las dos principales preocupaciones para los españoles según el último barómetro del CIS. Tras el paro y la corrupción, «los políticos en general, los partidos y la política» se coloca como tercer quebradero de cabeza para el 29,5% de los españoles, dos décimas más que el barómetro del mes de septiembre y más de 10 puntos que el del mes de julio. Por detrás, se sitúan los problemas de índole económica (24,2%).