AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Abstención es rendición incondicional

Redacción




Susana Díaz no da la cara. /Foto: lasprovincias.es.
Susana Díaz no da la cara. /Foto: lasprovincias.es.

Miguel Sempere

Se van mostrando las cartas, muy marcadas. Susana Díaz no se atreve a dar la cara y manda por delante a su secretario de organización, Juan Cornejo al que no le da urticaria la abstención. Guillermo Fernández Vara establece la disyuntiva entre abstención y terceras elecciones.

Es tan fuerte el escenario de sumisión a Rajoy, de hacerle presidente, que se edulcora abstención con el esotérico adjetivo de técnica, que no se sabe qué significa.

Miquel Iceta, reforzado por la militancia, esa a la que sí le da urticaria recurrir a Juan Cornejo y a su señorita, Susana Díaz, reitera que los catalanes votarán no.

Empieza a haber miedo a la ruptura de la disciplina de voto y se especula mucho con que once diputados socialistas se abstengan. Una forma un poco hipócrita de transitar hacia una gran coalición indeseada.

Porque, el día después ¿qué? Si es el PSOE el que da acceso a la presidencia a Rajoy, es el PSOE el que tiene que sostenerlo, mediante sucesivas abstenciones de esas técnicas.

La abstención del PSOE no es otra cosa que el último intento de la casta por mantener sus privilegios, empezando por los del multimillonario José Bono.

La abstención es una infamia, una perversión democrática, pues el PSOE pidió el voto contra Rajoy. Abstención rima con rendición. Es, de hecho, una rendición incondicional.

Mientras tanto miles de firmas piden Congreso extraordinario. ¡Qué vuelva Pedro Sánchez!