Miguel Sempere
José Bono Jr considera que es difícil hacer una carrera importante de jinete sin ser millonario, pero no hay que perderla esperanza: “también hay otros caminos. Hay que trabajar mucho, pero yo lo que quiero es cumplir mi sueño”.
Hay que tener en cuenta que el nivel con el que se codea es alto. Estamos hablando de Athina Onassis, de los Onassis de toda la vida, de los barcos; Carlota Casiraghi, de los croupier de Montecarlo y Marta Ortega, la heredera de Inditex. Con todas ellas, “la relación es cordial, pero no va más allá de los concursos. De las tres me quedo sin duda con Marta, que la conozco mucho más; es un encanto y muy profesional. Es una chica que lo tiene también complicado en sus relaciones sociales porque se acerca la gente y le hace la pelota. En otro sentido, es lo mismo que me pasaba a mí con el poder de mi padre. Empatizo más con Marta”.
No era tan fácil de imaginar que de Salobre, Albacete, saliera un jinete, apellidado Bono, como el jefe local del Movimiento y como un político socialista, que se codeara con apellidos como Onassis, Casiraghi y Ortega. Hay que trabajar mucho, no siendo millonario, pues hay otros caminos…aunque José Bono Jr no nos dice cuáles para tomar nota y aprender.
Tampoco puede quejarse, dedicándose sólo a la competición, ha conseguido un patrimonio inmobiliario que no tienen, desde luego, otros jóvenes a su edad. Es propietario, desde el año 2009, de un ático, adquirido por un millón de euros, que estaba a la venta por 1,8 millones de euros, en la Calle San Justo, 1, en el Madrid de los Austrias, cerca de la Plaza Mayor, y frente a la Basílica Pontificia de San Miguel. Las obras fueron importantes y realizadas por Reyal Urbis.
También es propietario, a través de la mercantil Attack, de la que es apoderado, de un chalet de 254 m2 edificados, con parcela de 424 m2, en El Vergel de Bargas, adquirido por 300.000 euros.
Cuando no se llega, siempre hay un amigo para echar una mano. Según publicó El Confidencial, sin que conste desmentido alguno, el empresario Rafael Santamaría le regaló dos caballos pura sangre de competición, valorados en 200.000 euros. Para la compra de uno de ellos, Farceur du Haul, Bono entregó a un colaborador 100.000 euros en billetes de 500, envueltos los fajos en papel de periódico, según publicó El Confidencial.
De donde saca para ir comiendo y compitiendo José Bono Jr es de Hípica Almenara, de la que es su administrador. Es la joya de la corona de los Bono. Se empezó a construir en 2001, aunque después ha tenido sucesivas mejoras, una de ellas, por 600.000 euros, realizada por la empresa Onde 2.000, de Francisco Hernando, El Pocero. Hípica Almenara está en una finca de 170.000 m2, de los que tiene construidos 18.000. El IBI de Hípica Almenara es reducido, de favor, pues su valor catastral está fijado en 208.100 por el suelo y 0 por la construcción. En comparativa, las fincas limítrofes pagan un Ibi, 22 veces superior. Hípica Almenara está valorada en 7 millones de euros.
En el año 2004, Onde 2000 realizó obras de mejor por un valor de 600.000 euros. Los clientes publicitarios de la Hípica pagaron buena parte de las obras, como una especie de intercambio. Porcelanosa debió ver muy interesante anunciarse en la Hípica, porque pagó 284.000 euros, no a Bono, sino directamente a Onde 2.000: 180.000 por la torre publicitaria de 17 metros de altura y otros 104.000 euros. Seguro Pelayo sufragó las obras también con 30.000 euros y Hotel Beatriz desembolsó 90.000.
Los anunciantes de la Hípica son lo más granado y rutilante de las multinacionales y el Ibex 35: Banco de Santander, Coca-Cola, Endesa, Iberdrola…
Se puede ser jinete sin ser millonario, al parecer, pero, desde luego, ayuda. José Bono Jr es millonario; no tanto como Onassis, Ortega y Casiraghi, pero el hermano de Sofía, la alumna de Brillantmont School, 150 alumnas, 70.000 euros/curso, tampoco va, ni mucho menos desnudo, a las competiciones.