Federico Trillo, la historia de una gran mentira: Amistades peligrosas

Yrene Calais ¡Ah! Creía este bellaco que se había librado de mí… Pues no. Aún va a tener que soportarme por lo menos en este artículo. Aún lo recuerdo sentado, en unas modestas sillitas de madera, carcomidas, al lado de Pedro Ángel Hernández Mateo, su íntimo amigo y gran valedor en el imperio torrevejense, contemplando … Sigue leyendo Federico Trillo, la historia de una gran mentira: Amistades peligrosas