Virginia Montes
Donald Trump llevará como vicepresidente al gobernador de Indiana, Mike Pence. En el acto de presentación, en Manhatan, Nueva York, Trump consideró que estos tiempos precisan un liderazgo fuerte y prometió “fuerza, ley y orden”.
«Estoy aquí para presentar a la persona que será mi socio en la Casa Blanca«, dijo Trump al salir, e inmediatamente se refirió al reciente atentado en Niza para asegurar que «necesitamos un nuevo liderazgo» para reforzar la «ley y el orden».
«El horror nunca parará, necesitamos un nuevo liderazgo, fuerza, ley y orden y si soy elegido presidente, eso pasará», afirmó Trump, quien no dejó pasar la oportunidad de culpar al gobierno de Barack Obama y de Clinton, su virtual contrincante en las presidenciales.
En un escenario impecablemente iluminado en el Hotel Hilton localizado en Midtown, once banderas de Estados Unidos y un podio adornado con un mensaje que leía “Trump: New York, New York” y su lema “Make America great again” (Hacer EEUU grande de nuevo) eran su escenografía.
«Pence fue mi primera elección, he admirado su gestión en Indiana. Es una persona sólida», dijo Trump de su compañero de fórmula.
“Estamos hartos de políticos que abordarán los problemas más adelante
Pence, un cristiano comprometido, de pie solo flanqueado por banderas estadounidenses, se describió a sí mismo como «realmente un chico de un pueblo pequeño». Elogió efusivamente a Trump al llamarlo «un buen hombre», un guerrero, un legendario empresario y un estadounidense patriota.
«El pueblo estadounidense está harto», dijo Pence. «Estamos hartos de que se nos diga que todo está lo mejor posible. Estamos hartos de que políticos de ambos partidos en Washington, D.C., nos digan que abordaremos esos problemas más adelante».