Enrique de Diego
Mariano Rajoy y José Manuel García-Margallo estrecharon sus relaciones de amistad en los veranos de la década de los ochenta, cuando ambos se dedicaban al “turismo sexual” en diversos destinos caribeños.
Cuento para hacer pública esta escabrosa historia con el testimonio personal del actual ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, que me lo contó en Alicante, a la salida de un mitin.
Margallo, que en el momento de la narración era europarlamentario, presumió de ser el único amigo de Mariano Rajoy. Esa amistad se había forjado o estrechado cuando a comienzos de los años ochenta ambos aprovechaban los veranos para irse juntos de turismo sexual en el barco propiedad de García–Margallo.
Mariano Rajoy, que era concejal por Pontevedra y presidente de la Diputación, estaba soltero y José Manuel García-Margallo se había divorciado de la primera esposa. Los destinos preferidos por los dos pichabravas eran Isla Guadalupe y República Dominicana, donde según la expresión utilizada por García Margallo se dedicaban al “tiro a la mulata”.
García-Margallo ha actuado en el Consejo de Ministros con la seguridad de ser amigo del ‘jefe’, saliéndose incluso de su marco competencial para entrar en polémica en relación con Cataluña y mantener incluso debates sobre la materia. Actualmente, suena como uno de los candidatos del PP con más posibilidades para la presidencia del Congreso.